Esta acción llamó la atención del mundo. Durante esta histórica cumbre, el presidente Moon Jae-in y el líder Kim Jong-un acordaron realizar inmensos avances en las relaciones intercoreanas y establecer un régimen de paz sólido sólida y permanente en la península coreana por medio de la Declaración de Panmunjom en pos de la paz, la prosperidad y la reunificación de la península de Corea.
La cumbre intercoreana de 2018 fue un momento crucial en los esfuerzos para lograr la paz y la desnuclearización de la península coreana, así como en la mejora de las relaciones intercoreanas. Los vínculos se han reactivado, y el municipio de Panmunjom, que había sido símbolo de la división, se ha convertido en la actualidad en un símbolo de paz.