Reporteros Honorarios

18.04.2024

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Por la reportera honoraria Liliana Tlamani de México
Fotografías: Liliana Tlamani

Quiero contarles de una experiencia increíble que tuve recientemente. Estas vacaciones tuve la oportunidad de dar clases a los pequeños de mi comunidad y en uno de los días de actividades, cuyo tema era conocer otra cultura, y entre las opciones de países, algunos de los niños eligieron aprender más sobre Corea. Me sorprendió mucho que a su corta edad conocieran sobre este país. ¡Pero algunos de ellos ya han visto series coreanas e incluso les hace mucha ilusión visitar este país y hasta aprender coreano! Yo, con muchísima emoción, quise prepararles un día especial, cargado de diversión y aprendizaje para sumergirnos en la fascinante cultura coreana.


La foto muestra las banderitas de Corea (derecha) y unos hanboks de papel, elaborados por los niños participantes.

La foto muestra las banderitas de Corea (derecha) y unos hanboks de papel, elaborados por los niños participantes.



Después de su lección, les preparé una experiencia de simulación para estar en un avión con destino a Corea, con sillas, meriendas y una pantalla con videos de una cabina de avión. Me inspiré en la experiencia similar que una maestra les ofreció a sus alumnos en una escuela. Y bueno, se divirtieron mucho en el “vuelo” y una vez que aterrizamos, les solicité sus pasaportes, los cuales habían decorado previamente, y les puse un sello de entrada al país. Les di una breve introducción sobre Corea, hablando de su historia, tradiciones y comida típica. Les mostré fotos, videos y curiosidades sobre Corea para que pudieran conocer un poco más sobre este fascinante lugar. Lo cual les encantó y les sorprendió. Después de eso, hicimos algunas manualidades. Los niños mostraron su lado creativo al pintar banderitas del país y pequeños hanboks de papel. Me encanta que hayan podido aprender sobre su bandera y su significado.

La siguiente aventura llegó cuando tuvimos un taller improvisado de cocina para aprender a preparar bibimbap. Los pequeños estaban emocionados de ver cómo se preparaba este plato típico coreano, nuevo para ellos, así como todo lo anterior. Elegí ese platillo porque contiene ingredientes familiares, como el arroz, las verduras y el huevo, y creí que se sentirían más confiados al probarlo. Busqué varios videos para saber cómo hacerlo y traté de incluir todos los vegetales posibles, hice mi mejor esfuerzo, pero debo decir que todo iba bien hasta que mezclé la salsa gochujang junto con el aceite de sésamo, y se sorprendieron aún más cuando vieron que iba a mezclar el huevo con la yema todavía líquida junto con todos los ingredientes. Vi sus caritas inmediatamente con gestos de sorpresa y duda, pero les pedí que confiaran en el proceso y que expresaran su opinión luego de probar el primer bocado, y les expliqué que la diferencia en la preparación no implicaba que fuera extraño, sino que simplemente hay diferentes sabores en los platillos de otros países, pero que eso enriquecería su paladar con nuevos sabores.


La foto muestra el bibimbap en una cazuela de barro y la salsa de chile rojo gochujang.

La foto muestra el bibimbap en una cazuela de barro y la salsa de chile rojo gochujang.



Para muchos de estos pequeños, probar el bibimbap significó su primer encuentro con un plato distinto a la comida mexicana o la comida rápida estadounidense. Y a pesar de que admito haber exagerado un poco con la salsa gochujang, dándole un toque más picante de lo que están acostumbrados y de haber olvidado añadir azúcar, ¡ups!, el resultado fue positivo. ¡Aunque me olvidé de unos ingredientes, a todos les encantó la experiencia!

Tristemente, no pude darles a probar un dulce coreano, (no son tan fáciles de conseguir en mi comunidad) pero espero que en la siguiente ocasión pueda hacerlo. Se merecen la experiencia completa.

Me encantó ver cómo los pequeños demostraron un gran interés por conocer más sobre Corea durante toda la actividad. Sus caritas reflejaban entusiasmo al descubrir cosas nuevas y diferentes. Fue muy gratificante compartir con ellos mi pasión por este país y observar cómo disfrutaban sumergiéndose en él.

Uno de mis objetivos era dejarles una bonita experiencia con esta actividad, así como que vivieran una pequeña interacción cultural de nuestro enorme mundo.

Así que, si alguna vez tienen la oportunidad de organizar un día cultural como este, ¡no duden en hacerlo! Les aseguro que a los niños les encantará  y creará en ellos una experiencia única y memorable.

Debo decir, también, que esta experiencia me hizo amar aún más la cultura coreana y estoy segura de que los peques de mi comunidad recordarán este día por mucho tiempo, así como yo lo haré.

kimhyelin211@korea.kr

* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.