Por la reportera honoraria Esther Verónica González Montiel de España
Foto promocional del drama 'La buena mala madre' | Netflix
El drama "La buena mala madre" en sus 14 episodios proyecta lo real y lo fuerte que puede llegar a ser la influencia tanto pasiva como activa de una madre en la vida de sus hijos.
Dirigido por Shim Na-yeon, este drama protagonizado por Ra Mi-ran y Lee Do-hyun, narra la historia de Jin Yong-soon, la dueña de un criadero de cerdos que tras la muerte repentina de su marido, debe criar sola a su hijo Choi Kang-ho.
Yong-soon era muy estricta con su hijo, hasta el punto de impedirle que entablara relaciones con los chicos del pueblo donde vivían, porque no quería que su hijo repitiera su historia. Según ella, debía estudiar para ser fiscal en Seúl y no entretenerse con sus iguales, que tenían pocas aspiraciones en la vida. Con el paso del tiempo, tras graduarse de fiscal, se volvió ambicioso, frío, desprendido con ella, con la gente y hasta corrupto, muy lejos del ideal de lo que su madre anhelaba para él.
El argumento central de la serie coreana es la relación materno-filial entre Yong-soon y Kang-go, sus aciertos y desaciertos. Ambos tienen la oportunidad de reencontrarse y reconectarse de una manera sana, espontánea, y fructífera luego de un trágico accidente en el que Kang-ho presenta un episodio de amnesia.
Yong-song cae en cuenta que debía rectificar su forma de criarlo y dejar de ser una madre inaccesible, distante y con una actitud negativa. Es por eso que cambia de estrategia y se muestra más flexible. Ella debía volver a enseñar a su hijo a valerse por sí mismo para que en un futuro se encargará de la granja de cerdos cuando ella faltara.
El fin de la segunda oportunidad que les dio la vida fue recuperar la relación que se había perdido cuando él se mudó a Seúl al salir del yugo materno, sanar el vínculo y reencontrarse con otra actitud más benévola para ambos.
Los elementos claves del drama son los cerdos, así como la canción de la década de los 80 "I'm happy", de Yoon Hang gi, que se escucha durante todo el drama, incluso es el tono de las llamadas del celular móvil de la protagonista.
Otro elemento que también le dan color, ternura, vida y sentido al drama, es la aparición de Seo Jin y Ye Jin, los hijos del protagonista que concibió con su novia de toda la vida.
Si eres de lágrima fácil, te aconsejo tener muchos pañuelos al lado, vas a derramar muchas. Te encantará si amas las series sobre la maternidad y la crianza. Además, Lee Do-hyun es un actor que sabe llorar y te convencerán sus lágrimas. De seguro pasarás al siguiente nivel. Te conmoverá su magistral actuación.
shong9412@korea.kr * Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.