Por la reportera honoraria de Korea.net, Macaria España de México
26 de octubre de 2020
Portada del libro l Andrii Ryzhkov
Cuando el doctor Andrii Ryzhkov* recibió la invitación de AMEK A.C. para participar en un proyecto de traducción de leyendas de pueblos originarios mexicanos, no lo pensó dos veces y accedió a sumar su vasta experiencia en estudios coreanos y como traductor, para lograr llevar al lector coreano estas expresiones, no sólo literarias sino identitarias, de los pueblos zoque y chole de Chiapas.
Si bien la literatura mexicana no ha pasado desapercibida en Corea del Sur, las tradiciones indígenas y su narrativa, han sido menos exploradas.
¿Cuál es el interés en que la cosmogonía de estas etnias sea conocidas en Corea del Sur?
- México se conoce en Corea bastante bien por su legado literario de muchos escritores y escritoras. Sin embargo, esto refleja solamente una parte de la cultura mexicana. Las tradiciones indígenas, que son igual de importantes y representativas de las culturas mexicanas, a pesar de ser igual de valiosas, casi no llegan al público del país asiático. Claro, el libro representa sólo algunas narrativas, sin embargo, espero que a través de esta pequeña aportación se despierte el interés por las culturas y tradiciones de los pueblos originarios de México, no solo en el público en general, sino por los traductores profesionales, espero que ese lado de la cultura mexicana llegue a conocerse más. Es importante que México sea conocido por los coreanos no solo como un socio económico, sino también por su diversidad cultural. Reitero, este libro es un primer aporte de lo que se puede hacer para fomentar el intercambio cultural entre ambas naciones, pero aún falta mucho por hacer.
¿Se contó con algún apoyo gubernamental? ¿En qué consistió?
- El libro es el resultado de uno de los múltiples proyectos que lleva a cabo AMEK A.C. con apoyo de KOICA, un organismo gubernamental coreano. También es patrocinado por la Embajada de la República de Corea en México.
¿Cuánto tiempo llevó este proyecto desde su concepción hasta verlo ahora impreso como libro?
- El proyecto se realizó en varias etapas. La primera, consistió en recopilación de las narrativas en Chiapas. De hecho, los colegas de AMEK A.C. están programando varios eventos de presentación, dónde nos contarán a detalle sobre el trabajo de campo, así como otros aspectos importantes para que este libro fuera posible.
En cuanto al proceso de traducción, corrección de estilo y redacción, estamos hablando de unos seis meses de trabajo a marchas forzadas y sin descanso.
¿Cuál fue la parte más difícil de este proceso?
- El no tener un foro académico de profesionales en la traducción literaria coreano-español-coreano en México. Por suerte, conté con el valioso apoyo de la Dra. Nayelli López Rocha, Antropóloga y especialista en Estudios Coreanos, pero algunos detalles los tuve que consultar con especialistas en Corea.
¿Cuál fue la parte más divertida o gratificante?
- La más gratificante es que a la par de aportar a que las culturas de los pueblos originarios de México sean un poco más visibles en nuestro país-socio, fue también saber que este libro se escribió en México, contribuyendo también a los Estudios Coreanos en general, ya que se puede utilizar como material para la enseñanza del idioma, traducción literaria, o para estudios de traducción y culturales.
Señala que este libro rompe la tendencia de las traducciones hechas por especialistas coreanos, ¿por qué cree que es importante o significativo romper esta tendencia y qué diferencia habría con otras traducciones hechas por especialistas coreanos?
- Como he mencionado antes, México se conoce en Corea por sus grandes obras contemporáneas, obras que han sido escritas en español. Lo que se queda en olvido, son las narrativas de los pueblos originarios, de sus lenguas y sus culturas. Como se sabe muy bien, Corea es un país muy dinámico, pero al mismo tiempo también pragmático. Esto implica que el mercado editorial del país asiático esta principalmente enfocado en obras más famosas y conocidas, por lo que las casas editoriales y los traductores se ven obligados a enfocarse en lo que “se vende”.
Por lo anterior, pienso que no hay mejor manera de dar a conocer otra parte de la cultura mexicana a que esto se haga en México. Si bien es cierto que México todavía no cuenta con muchos especialistas mexicanos en el campo de traducción literaria coreano-español-coreano, esto de ninguna manera significa que no debemos de buscar la forma de profesionalizar personas en la traducción y que desde México se aporte en la difusión de la diversidad cultural que lo caracteriza.
Además, ya hacía falta un poco de la “sana competencia” entre los traductores de distintos países para romper con las tendencias monopolistas. La diversidad en prácticas, aproximaciones o visiones en el ámbito profesional inspiran a buscar mejores soluciones.
¿Cómo ve el panorama de la traducción del español al coreano? ¿Qué se necesitaría para tener una mayor producción al respecto?
- En términos generales, por el momento la enseñanza del coreano en México siempre adquiere la forma de una figura complementaria a la formación principal de los estudiantes, pues el idioma se ofrece como acompañante de la formación o especialización en otras áreas en vez de ubicarlo en el papel primordial, como se hace en Corea con el español. En una situación así, la perspectiva de formar especialistas en materia de traducción del idioma asiático se percibe aún más lejana. Para tener una mayor producción, primero debemos de pensar como impulsar los Estudios Coreanos como una especialización desde alguna universidad emblemática de México.
¿Considera que el lector coreano está ávido de este tipo de textos?
- Primero quiero mencionar que en Corea existen múltiples departamentos y centros de estudios hispánicos, donde se concentran los estudios sobre diversos países de América Latina, entre ellos México. Supongo que muchos especialistas y estudiantes estarían interesados profesionalmente en el libro y no solamente por todas las opciones de su posible uso en aula o como material de análisis. Quizá es por ello que la Embajada de México en Corea ya mostró el interés en distribuir el libro a las universidades y centros correspondientes.
Por otra parte, las fábulas, cuentos o leyendas forman parte del patrimonio mundial y de las culturas originarias alrededor del mundo, por lo que, siendo un reflejo de valores universales, sin duda alguna, encontrarán sus admiradores en cualquier parte del planeta, al igual que los cuentos coreanos siguen siendo traducidos a diversos idiomas. Finalmente, el aporte del libro es abrir más ventanas a la diversidad cultural y lingüística de México para los coreanos, para que la idea que tienen de México se enriquezca en el imaginario coreano.
* Doctor en Lenguas de Asia y África con especialidad en lengua coreana, grado otorgado por la Academia Nacional de Ciencias de Ucrania. Graduado de la Universidad Nacional de Kyiv Taras Shevchenko. Es perito traductor e intérprete de los idiomas coreano, ruso, ucraniano e inglés, avalado por el Poder Judicial de México. Actualmente imparte clases de coreano en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
eliasmolina@korea.kr
*Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.