Reporteros Honorarios

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Por la reportera honoraria de Korea.net, Laura López Velázquez de México
18 de febrero de 2021

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Estatua del Almirante Yi Sun-sin; la espada en su mano derecha representa la protección y el patriotismo. | Pixabay


Acerca de las cosas que ver en Seúl, la capital de Corea del Sur, uno de los lugares más emblemáticos e históricos es la plaza Gwanghwamun, donde se pueden ver las estatuas de grandes dimensiones del Almirante Yi Sun-sin y el Rey Sejong el Grande de la dinastía Joseon, quienes son dos de los personajes más importantes en la historia coreana. Sobre todo, según Gallup Korea, la empresa de encuestas más representativa de Corea del Sur, el Almirante Yi Sun-sin ha sido el personaje y héroe nacional más admirado por los coreanos durante más de 40 años. Y es por ello que es fundamental conocer los relatos y los logros de su vida para entender mejor la historia de Corea.

Yi Sun-sin nació el 28 de abril de 1545 en la ciudad de Seúl, actual Corea del Sur. Desde niño mostró interés por el funcionamiento de las armas, por lo que, al crecer, quiso ser soldado para dedicarse a la defensa de su patria, sin embargo, sus padres querían que continuara con la tradición de ser un erudito literario, así que se dedicó a estudiar la historia y filosofía de China. En 1566 se le presentó la oportunidad de ser un oficial militar, por lo tanto, se puso a estudiar las artes militares, y seis años después, se presentó al examen de selección de oficiales, pero, lamentablemente, no lo aprobó porque se quebró una pierna.

Siguió preparándose, y al final, en 1576, fue aceptado en la carrera militar. Luego en 1591, con 46 años de edad, fue nombrado comandante con el grado de almirante de la Estación Naval de Jeolla. A partir de ese tiempo, se comprometió a entrenar a los oficiales y hombres bajo su mando y se dispuso a mejorar la eficiencia de la defensa marítima, introduciendo la implantación de armas de fuego a bordo. Sobre todo, mantenía una de las enseñanzas básicas referidas a los países marítimos: “Ningún invasor que venga a través del mar puede obtener la victoria final, a menos que mantenga el mar bajo su completo control”.

Buques revolucionarios marítimos

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Réplicas y monumento del barco tortuga y diseño del Panokseon | Pixabay y Wikimedia Commons


Yi Sun-sin analizó las acciones navales pasadas y presentes de la armada japonesa y coreana, y con esa información se dedicó a perfeccionar el diseño del Geobukseon (거북선), un buque blindado llamado “Barco Tortuga”. Algunos piensan que Yi Sun-sin lo inventó, no obstante, estos barcos ya existían desde el siglo XV. Este buque solo servía cuando se necesitaba romper la formación enemiga, por lo que nunca fueron tan frecuentes como se cree. La proa del barco tortuga estaba equipada con una cabeza de dragón, por donde se disparaban cañones y se emitían nubes de humo que servían para ocultar la embarcación. La cubierta superior estaba protegida por un techo curvo hecho de placas blindadas a la cual se le colocaron cuchillos filosos, cabezas de lanzas y estacas, para dificultar el abordaje de las fuerzas enemigas.

El verdadero protagonista de las batallas navales fue el Panokseon (판옥선), un buque de vela y remo, creado específicamente para el combate. En este buque recayó el mayor peso de la guerra, por algo lo llamaban la espina dorsal de la marina coreana. Ambos buques jugaron un papel muy importante, porque podían evitar el punto fuerte de los japoneses, el enfrentamiento cuerpo a cuerpo. Cabe señalar que, los fondos para la construcción de estos buques no fueron proporcionados por el gobierno sino fueron reunidos por el almirante, gracias a su perseverancia y deseo de proteger a su nación.

Batallas navales

En el periodo de 1592 y 1598 ocurrió la Guerra Imjin y Japón estaba preparando un plan detallado para comenzar su campaña invasora, debido a que buscaba conquistar primero Corea para la posterior ocupación de China. Yi Sun-sin y su flota vencieron a los invasores en sucesivas batallas durante 1592, por lo que las fuerzas japonesas se retiraron del país, pero volvieron a invadirlos en 1597. Durante esta batalla, los coreanos solo disponían de una docena de barcos para enfrentar a aproximadamente 333 buques japoneses. En la siguiente imagen les muestro solo algunas de las muchas batallas que sucedieron en ese tiempo.

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Cronología de algunas batallas lideradas por Yi Sun-sin. Las fechas corresponden al calendario lunar. | Wikimedia Commons


Por esta razón, Yi Sun-sin decidió entablar la batalla en el Estrecho de Myeongnyang. Este lugar es conocido como “el canal rugiente”, cuenta con 293 m de ancho y se caracteriza por su escasa profundidad y su ciclo de mareas. Así que usaron un barco como señuelo para atraer a la flota enemiga hacia este lugar, donde creían que estaba reunida la flota coreana. Dadas las condiciones geográficas y las corrientes muy fuertes del canal, impedían operar a los barcos japoneses y los hacían chocar unos contra otros. Esta batalla ha sido uno de los mayores combates militares de todos los tiempos, por ello, se le conoce como la “batalla milagrosa”. Con esta gran hazaña, los coreanos nuevamente consiguieron la victoria en 1597.

Un año después, aconteció la batalla final en Noryang, donde murió el almirante a causa de una bala perdida, el 15 de diciembre de 1598. Su última voluntad fue que cubrieran su cuerpo con un escudo para no desanimar a sus hombres en medio de la batalla. Su muerte fue un gran golpe para su pueblo, quien perdía a un gran líder. Después de su muerte, la Corte Real Coreana le concedió honores, honrándolo con los siguientes títulos: Chungmugong (Señor Marcial Leal), Seonmu Ildeung Gongsin (Sujeto de mérito de primera clase), Deokpung Buwongun (Príncipe de la Corte de Deokpung), Primer Ministro de la oficina póstuma de Yeonguijeong y Yumyeong Sugun Dodok (Almirante de la Flota de la Dinastía Joseon).


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Estatuas de Yi Sun-sin localizadas en Seúl, Busan, Yeosu y Mokpo. Enfrente de su estatua en Seúl, se encuentra un barco tortuga en miniatura y en cada lado hay dos tambores que se usaban aumentar la moral de las tropas en el campo de batalla. | Pixabay y Wikimedia Commons 


Yi Sun-sin es considerado un héroe de la marina coreana, por lo cual, le han dedicado muchos santuarios y monumentos por todo el país, en honor a su valiente espíritu y liderazgo. Una de sus estatuas más conocidas se encuentra en la plaza Gwanghwamun y las otras de las cuales tengo conocimiento se localizan en Busan, Yeosu y Mokpo. Igualmente, el Diario de Guerra de Yi Sun-sin, también llamado el Nanjung Ilgi (난중일기) en coreano, es un Patrimonio Documental de la UNESCO inscrito en el Registro de la Memoria del Mundo en 2013. Este diario lo escribió durante las invasiones japonesas y describe en detalle los combates, sus opiniones personales y sentimientos, entre otros datos.

El Almirante Yi Sun-sin fue único, con una personalidad extraordinaria, genialidad creativa, estrategia sobresaliente y victoriosa en todas sus batallas. Fue muy querido por sus subalternos, disciplinado en todos los aspectos e inalterable ante la adversidad. Por ello, permanecerá en la memoria de todos los coreanos y de personas que conocemos su historia y lo respetamos de igual manera. Sobra decir que, sin este gran hombre, la historia hubiera sido muy diferente.

eliasmolina@korea.kr

* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.