Por la reportera honoraria Nerea Alejandra Ramírez Castillo de México
El follaje amarillo es característico de Corea durante el otoño y el cambio de color de las hojas es uno de los espectáculos más hermosos que ofrece el país.
Por el tiempo que ha permanecido en la tierra, el gingko es considerado un "árbol fósil" que hoy nos brinda hermosas vistas en el otoño. El follaje amarillo es característico de Corea durante el otoño y el cambio de color de las hojas es uno de los espectáculos más hermosos que ofrece el país.
Hace unos días, la página de Facebook de Korea.net realizó una publicación sobre los árboles de gingko en las inmediaciones de la plaza de Gwanghwamun y como me encanta esa zona de Seúl, compartí ese post, y enseguida, mi mejor amiga, Karem Vázquez-Román, quien estudia su doctorado en Biología en la Universidad del Norte de Texas, me comentó que se trata de una especie importante porque es considerada un "árbol fósil", pues se trata de una especie muy vieja.
Quise averiguar más al respecto, así que indagué con mi hermana, Fátima Ramírez, estudiante de Ingeniaría Ambiental en la Universidad Autónoma de Tamaulipas a qué se refería el término "fósil" aplicado a esta especie y ella me explicó lo siguiente: "Decimos que es un árbol fósil porque se trata de una cajita de información que contiene la historia de esa zona o incluso sobre el planeta. Cuando tú quieres saber la historia de un lugar, vas y le preguntas a la persona más vieja, lo mismo pasa con este árbol", me explicó. “
Agregó que, por ejemplo cuando se hace un estudio sobre el árbol, y se ven las capitas del árbol, se puede saber sobre su ‘vida personal’, como cuánta agua recibió e incluso permitir saber las condiciones del ambiente en el que creció, pero si se indaga más, en su ADN, se puede obtener información evolutiva.
Y es que este árbol tiene su origen en el periodo paleolítico, es decir, existe desde antes de los dinosaurios y ha sobrevivido a muchos cambios en el planeta en los cuales muchas especies se han extinguido, pero el gingko sigue en pie. Asimismo, ha demostrado ser resistente a plagas y otro tipo de fenómenos. De ahí la importancia de su existencia y preservación.
Este árbol crece en Corea, China y Japón, de hecho, su llegada a la península coreana, se dio junto con la introducción del confucianismo, pues se dice que, Confucio enseñaba a sus discípulos bajo este árbol, por lo cual se adoptó como símbolo de su filosofía en Corea, aproximadamente en el siglo XIV.
A pesar de su origen asiático, crece en otros continentes como Europa o América, debido al intercambio que se dio a partir de los movimientos colonizadores.
En los años 70 se convirtió en el árbol emblemático de Seúl, además de que fue nombrado monumento natural número 59 de Corea, por lo que están protegidos por el Gobierno del país. Además, su madera es utilizada para la elaboración de muebles y sus frutos son comidos durante el otoño.
A pesar de ser un árbol emblemático y bello, un aspecto negativo que encuentran los seulitas es su fuerte olor, pues los frutos, al caer al suelo emiten un olor que para las personas es desagradable. Algunas investigaciones han determinado que este olor característico es una respuesta evolutiva, pues llegaron a la conclusión que era la forma de atraer a los dinosaurios para que comieran sus frutos como forma de polinización en ese periodo histórico. Hoy en día, son los humanos los que consumen lo que otrora comieran los dinosaurios. A pesar de las bondades de sus frutos, pues se estudia sus beneficios para la salud humana, el olor incómodo para la gente obligó en su momento a las autoridades a remover a los árboles hembra a lugares apartados.
kimhyelin211@korea.kr
* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea