Por la reportera honoraria Miriam Guadalupe Peñaloza Anell de México
Fotografías: Hyonmi
Corea del Sur, un bello país en el cual se tiene la oportunidad de vivir experiencias únicas e inolvidables tanto como extranjero y local, nos introduce a una nueva forma de vivienda, el goshiwon, o mini estudio, el cual consiste de una habitación de aproximadamente 10 metros cuadrados que, a pesar de su reducido tamaño, proporciona lo indispensable para un turista sediento de nuevas experiencias o un estudiante en busca de máxima concentración. A continuación compartiré mi experiencia en estas pequeñas residencias y las historias que pude vivir dentro allí.
En un gosiwon promedio se puede encontrar el mobiliario como una cama individual, una mesa, una silla y un pequeño refrigerador.
Primero que nada, es importante considerar que un gosiwon es conocido por ser la opción más económica de alojamiento en Corea del Sur, pero a pesar de ello, no todos los gosiwon son iguales, dependiendo del precio incluirán más facilidades o una ubicación más conveniente. Como estudiante de intercambio permanecí la mayoría de mi estadía en Corea alojándome en el dormitorio universitario, el cual recomiendo ampliamente, pero después de que el semestre finalizara y las vacaciones comenzaran tuve que buscar una alternativa de vivienda que proporcionara lo suficiente para un estudiante sin muchos recursos económicos. Esto me llevó a experimentar por primera vez los gosiwon, famosos entre la comunidad extranjera viviendo en el país.
¿Cómo encontrar un gosiwon?
Encontrar un gosiwon que se adapte a tus necesidades no es una tarea difícil, existen innumerables opciones en internet a tu disposición, pero considero que la opción más conveniente como extranjero es Airbnb, si posees una cuenta de banco coreana y manejas el idioma a la perfección puedes encontrar mejores opciones en páginas coreanas. Pero como seguro se imaginan esta no era mi situación, por ello decidí usar Airbnb, una herramienta perfectamente compatible con tarjetas extranjeras y PayPal, junto con la opción de traducción automática y chat que te permite comunicarte fácilmente con tu anfitrión.
Después de amplia búsqueda y leer varias reseñas de posibles opciones, decidí escoger hospedarme con Hyonmi, la cual desde un inicio fue una increíble anfitriona que fue específica en todas las reglas a seguir y siempre respondió con amabilidad las preguntas que surgieron.
Traslado y localización
Mi pequeño cuarto que sería mi hogar se encontraba cerca de la estación de metro Sookmyung Women's University, una excelente localización que me permitía trasladarme a lugares turísticos con facilidad. A pesar de estar cerca, el traslado con maletas fue toda una experiencia debido a que el edificio estaba en una colina y, por lo que he podido investigar, muchos gosiwon se encuentran en zonas similares, es recomendable tener esto en cuenta al momento de trasladarte por primera vez.
Vida diaria
Al llegar por primera vez a la habitación me pareció muy sorprendente el reducido tamaño, apenas y había espacio suficiente para las dos maletas grandes que traía, pero a pesar de ello fue bastante satisfactorio, el lugar permanecía en silencio la mayor parte del tiempo y las áreas compartidas como la cocina, el baño y la lavadería estaban perfectamente limpias y eran fáciles de usar. Me encantó el sentido de responsabilidad y comunidad que se tiene dentro de los gosiwon.
La principal regla es tener en cuenta a tus vecinos, por ende todo lo que se usaba debía ser limpiado de inmediato, se trataba de ser silencioso todo el tiempo y hacer la estadía agradable para todos. Es muy importante revisar exhaustivamente las especificaciones de lugar, por ejemplo, este gosiwon era exclusivamente para mujeres, y por ello existían ocasiones en que las inquilinas dejaban productos extras que podrían ser útiles para otras chicas, formando una convivencia bastante placentera y comunitaria.
Un cuarto (izquierda) y la disponibilidad de alimentos en el área de cocina (derecha) del gosiwon en el que la reportera honoraria Miriam Guadalupe Peñaloza Anell vivió por un tiempo.
Al final del día, fue una experiencia satisfactoria y que recomiendo completamente si lo que se busca es un lugar económico, útil y por un periodo corto. Tu anfitrión forma gran parte de tu experiencia y estadía, es esencial ser analítico al escoger tu futuro hogar.
Considero que no es una opción ideal si tu estadía es a largo plazo, ya que puede llegar a ser frustrante lidiar con los espacios compartidos todo el tiempo, además de que una habitación con un tamaño reducido te limita la posibilidad de tener demasiado equipaje. Pero si se da la oportunidad de experimentar vivir en uno, definitivamente es una vivencia única y que se debe de tener al menos una vez como visitante de Corea del Sur.
kimhyelin211@korea.kr
* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.