Reporteros Honorarios

25.09.2024

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Por la reportera honoraria Ilse Díaz de México
Fotografías: Ilse Díaz

En junio, visité la exposición "Un año en Corea" en el Museo Folclórico Nacional de Corea. Esta exhibición ofrecía un recorrido por las costumbres de los coreanos de los siglos XIX y XX durante cada estación del año. Aunque normalmente asociamos el cambio de estación con aspectos simples como el clima o festividades conocidas, esta muestra me hizo apreciar otros elementos, como ritos tradicionales, creencias y prácticas culturales que enriquecen cada época del año.

Durante los primeros meses del año, hay fechas importantes que no solo se celebraban en el pasado, sino que continúan vigentes, como el Seollal (Año Nuevo Lunar) y Jeongwol Daeboreum (El Gran Festival de la Luna Llena). La primera suele celebrarse a finales de enero o principios de febrero, dependiendo de cuándo sea el primer día del calendario lunar, y la segunda se celebra dos semanas después.

Durante ambas festividades, las personas tienen ciertas costumbres cuyo objetivo es atraer buena energía y desear buena fortuna a todos. Algunas de estas tradiciones son, por ejemplo, colgar en la pared coladores de arroz conocidos como bokjori, o realizar rituales ancestrales como el denominado dongje. Este tipo de actos no solo son característicos de esta época, sino que, en general, y sobre todo en el pasado, había una intención muy presente en cuanto a atraer cosas positivas, como se verá que ocurre en las siguientes estaciones.

Celebraciones en primavera

Las fotos muestran un buey de madera (izquierda), utilizado en rituales chamánicos antes de iniciar la temporada agrícola en la isla de Jeju, y una réplica de los faroles que se colgaban en las casas para atraer paz y bienestar durante el año.

Las fotos muestran un buey de madera (izquierda), utilizado en rituales chamánicos antes de iniciar la temporada agrícola en la isla de Jeju, y una réplica de los faroles que se colgaban en las casas para atraer paz y bienestar durante el año.


En la primavera hay otra festividad importante: el cumpleaños de Buda, que se celebra en el octavo día del cuarto mes lunar, es decir, alrededor de mayo. Aún se celebra y, en el pasado, era muy común colocar un poste con faroles de colores frente a cada casa, uno por cada miembro de la familia, con el fin de atraer paz y bienestar durante el resto del año. Esta tradición no ha cambiado mucho, ya que las linternas continúan teniendo un papel importante en esta celebración; solo que actualmente suelen colgarse en hileras para formar un colorido techo.

Con la mejora del clima y las condiciones de la naturaleza en general, la primavera no solo representaba celebraciones, sino también el comienzo del trabajo tras un periodo de relativo descanso. Por eso, las personas que se dedicaban a arar los campos y a sembrar, llevaban a cabo rituales como el pungeoje y el yeongdeunggut, para pedir por unas buenas pescas y cosechas, y un regreso seguro al puerto. Este último ritual aún se realiza en la isla de Jeju.

Quizás ahora no se sienta un cambio tan radical para la mayoría de las personas, ya que no trabajan en el campo, pero sin duda, tras las celebraciones de diciembre, se siente esa atmósfera de comenzar de nuevo.

La primavera también era una época de alegría, ya que, tras el frío invierno, finalmente podían salir a dar paseos. Esto continúa vigente, siendo los picnics una de las actividades más populares en primavera.

Celebraciones en verano


La foto muestra el atuendo tradicional de verano de los siglos XIX y XX

La foto muestra el atuendo tradicional de verano de los siglos XIX y XX


En la exposición se muestra que el verano era la época con más trabajo, ya que los agricultores, tras haber arado los campos, debían sembrar y desherbar. Debido a la gran carga de trabajo, cada aldea organizaba un grupo de agricultores denominado dure, a cuyos miembros se les llamaba durepae. Cuando se terminaba con el trabajo, se celebraba una fiesta conocida como Homissisi como reconocimiento a su ardua labor.

Aunque lo anterior ya no tiene tanta vigencia, ciertamente hay dos eventos que continúan llevándose a cabo: el festival Dano y el festival Yudu. El primero se celebra el quinto día del quinto mes lunar, alrededor de junio, y se consideraba como el inicio del verano. Durante esta época, los deseos por rodearse de buena energía, como se mencionó anteriormente, seguían presentes, ya que una de las costumbres era fabricar talismanes para ahuyentar los malos espíritus. De igual forma, la gente se arreglaba de forma especial, acto que es conocido como danojang. Esto incluía lavarse el cabello con agua changpo, que se elabora a partir de lirios hervidos, y vestirse con un atuendo de ramio. Si se busca información sobre el festival Dano, muchas de las imágenes son precisamente de personas lavando su cabello en dicha agua.

Por otro lado, el festival Yudo o festival del agua se celebra alrededor de un mes después. Durante el mismo, la gente solía ir a los ríos para refrescarse. Esta costumbre todavía se practica hoy en día debido a las altas temperaturas que el país alcanza durante el verano.

Celebraciones en otoño


La foto muestra el calendario promocional de un tipo de soju y botellas de cheongju (vino de arroz), ofrecido durante el charye (rito ancestral) en el Chuseok.

La foto muestra el calendario promocional de un tipo de soju y botellas de cheongju (vino de arroz), ofrecido durante el charye (rito ancestral) en el Chuseok.


El otoño era la estación en la que el trabajo finalmente rendía frutos, ya que los trabajadores podían comenzar a cosechar los diversos tipos de granos que habían sembrado en las estaciones previas.

El decimoquinto día del octavo mes lunar, que suele ser en septiembre, se celebraba, y aún se celebra, una de las festividades más importantes en Corea: Chuseok o festival de la cosecha, en el que también se realizan una serie de ritos conocidos como el charye, con el objetivo de honrar a los antepasados. En esta festividad era tradición visitar a familiares y disfrutar de alimentos preparados con los granos cosechados.

Con el paso del tiempo, sin embargo, la forma de celebrar Chuseok ha cambiado, ya que, debido a la abundancia de alimentos, ya no se encuentra presente ese factor de celebración de la cosecha. No obstante, continúa siendo una época muy especial y de celebración en el país.

Celebraciones en invierno


Las fotos muestran el dongji patjuk (izquierda), un platillo típico de invierno que, según la tradición, ahuyenta a los malos espíritus, y una colección de tarjetas de Año Nuevo.

Las fotos muestran el dongji patjuk (izquierda), un platillo típico de invierno que, según la tradición, ahuyenta a los malos espíritus, y una colección de tarjetas de Año Nuevo.


El invierno es una de las estaciones que no ha cambiado mucho, ya que una de las actividades típicas continúa siendo la de preparar kimchi y meju (bloque de soja fermentada), ingrediente básico de varios condimentos coreanos como la salsa de soja y el gochujang (pasta de chile rojo). La preparación del kimchi, que se conoce como kimjang, es una actividad que une a muchas personas, ya que no suele hacerse individualmente. Su importancia es tal que fue reconocida como patrimonio cultural inmaterial por la Unesco.

Por otro lado, alrededor del 22 de diciembre también continúa celebrándose el solsticio de invierno, al que se le conoce como Dongji. En esta fecha, la gente intercambia calendarios para el próximo año y tarjetas con buenos deseos. Uno de los platillos típicos de esta festividad es el dongji patjuk (gachas rojas), el cual también se solía colocar en puertas y paredes para ahuyentar malos espíritus, esto debido a su color rojo, el cual en Corea se asocia con esa función.

En esta época de frío se hace uso del sistema tradicional de calefacción en el suelo, conocido como ondol, el cual ha sido utilizado desde hace mucho tiempo. La diferencia es que antes usaba leña como combustible y ahora se utilizan calderas de gas o eléctricas.

Cada estación tiene su propio encanto. Descubrir las tradiciones antiguas y ver que algunas se han mantenido hasta el presente fue una experiencia maravillosa.

shong9412@korea.kr

*Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afecto y entusiasmo hacia Corea.