Invitación del Webinar “Democracia, libertades y combate al COVID-19: el caso de Corea del Sur”. | COMEXI

Por la reportera honoraria de Korea.net, Monserrat Rocío Toral Sosa de México
22 de junio de 2020

El tema del nuevo coronavirus se ha abordado desde el punto de vista médico y económico, sin embargo, el tema legal no ha sido uno de los centrales. Por este motivo, el pasado 2 de junio de 2020, el Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI) organizó el webinar Democracia, libertades y combate al COVID-19: el caso de Corea del Sur, este forma parte de la serie de “Quarantine Webinars”. La principal participación fue del Embajador de México ante la República de Corea, Bruno Figueroa Fischer, para exponer el caso de este país bajo la óptica legal. El panel de discusión estuvo integrado por la Lic. Verónica Ortiz, Directora General del COMEXI; el Dr. Luis Rubio, Presidente del COMEXI y como moderador Agustín Barrios Gómez, Consejero COMEXI.

Corea del Sur es uno de los países que ha sido reconocido internacionalmente por su respuesta ante la emergencia sanitaria causada por el COVID-19 y como lo menciona el Emb. Bruno Figueroa, es de los pocos que ha cumplido con el protocolo completo de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que consiste en detectar, realizar pruebas, aislar, tratar los casos y rastrear cualquier contacto. Desde el mes de febrero de este año, la República de Corea, aplicó una vigilancia epidemiológica extrema y adoptó medidas legislativas para enfrentar la pandemia por el nuevo coronavirus.

Los aspectos más relevantes mencionados en esta ponencia son el papel fundamental de la Ley para el Control y Prevención de Enfermedades Infecciosas, el uso de la tecnología y acceso a la información por parte de las autoridades surcoreanas; y la relación entre el gobierno y la ciudadanía con el fin de afrontar la epidemia.

El Emb. Bruno Figueroa enfatizó que el resultado exitoso se debe a la aplicación de las políticas públicas derivadas de la Ley para el Control y Prevención de Enfermedades Infecciosas creada en el 2015. Es preciso resaltar que existe una experiencia previa en cuestiones sanitarias semejantes que derivó en su creación; cuando en 2015 el gobierno coreano enfrentó un brote del Síndrome Respiratorio por Coronavirus de Oriente Medio (MERS, por sus siglas inglés).

En esta situación, no tenían conocimiento de cuántas personas estaban contagiadas y, por lo tanto a quienes les habían transmitido el virus. Esta ley erga omnes, lo cual significa que abarca varios aspectos desde prohibir la exportación de cubrebocas, reuniones masivas, hasta acceder a información de la población a través de las compañías de telecomunicaciones, financieras y hospitales, con el fin de poder rastrear a los posibles contactos con riesgo de contagio. Asimismo, determina las facultades que otorga a las autoridades de salud surcoreanas para actuar durante una epidemia, que son dos; el Ministerio de Salud de Corea del Sur y el Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Corea del Sur (KCDC por sus siglas en inglés), puesto que se encargan de tomar todas las medidas necesarias con la finalidad de controlar cualquier enfermedad infecciosa.

La tecnología junto con el acceso a los datos de la población brindada por las compañías tienen un papel significativo en el monitoreo, debido a que las autoridades se percataron que la mayoría de los contagios se daban en lugares como cines, restaurantes, bares, entre otros; en donde la gente utiliza medios de pago con tarjetas de crédito y débito. Además, a través de una app que el gobierno obliga a instalar en los teléfonos móviles, puede disponer de la información al momento de los movimientos de las personas enfermas o en cuarentena, por consiguiente esto ha contribuido a controlar los brotes por COVID-19.

La confianza entre la ciudadanía y el gobierno ha sido un elemento imprescindible en los resultados de Corea del Sur para mitigar los contagios. El gobierno coreano, a diferencia de otros países, permitió que centros de entretenimiento como cines siguieran operando aún en los momentos más críticos de la epidemia. Los gerentes de las salas tienen la responsabilidad de tomar la temperatura a los clientes al momento de ingresar, al igual que asegurar que porten cubrebocas, sin embargo, la misma población por voluntad no asistía a este tipo de lugares así evitando la transmisión del virus.

El éxito de la respuesta de Corea del Sur frente a la pandemia del COVID-19, se debe a la acción conjunta de los tres factores anteriormente mencionados. El gobierno surcoreano utiliza a su favor su experiencia previa con el MERS, incorpora la tecnología y el acceso a la información de la población para el control de la pandemia (robustece la Ley para la Prevención y Control de Enfermedades Infecciosas) y por último; la respuesta y comportamiento de la ciudadanía surcoreana dispuesta a seguir las recomendaciones y medidas establecidas por el gobierno con el propósito de acabar con la epidemia. De acuerdo con lo anterior, este caso reitera la importancia de los instrumentos legales como parte de las estrategias que deben tomar los países, para el manejo y control de una emergencia sanitaria mundial.

kimhyelin211@korea.kr

*Este artículo fue escrito por reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.