Por la reportera honoraria Ilse Díaz de México
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Hace un tiempo visité la exposición permanente "Corea, la tierra de la calma matutina" en el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, en la Ciudad de México, que también está disponible en línea a través de KOREARTE, una galería virtual puesta a disposición del público gracias a la colaboración entre el museo, la Embajada de la República de Corea y el Centro Cultural Coreano en México.

La exposición muestra diversos aspectos de la cultura coreana, como sus ceremonias, costumbres, aportaciones en los campos de la ciencia y la tecnología, entre otros, por medio de obras que datan desde el período Neolítico hasta principios del siglo XX.

Desde una perspectiva personal, de las cuatro salas, la que me pareció más interesante fue "Vida Social y Religiosa Tradicional de Corea", donde se muestran objetos tradicionales elaborados por artesanos contemporáneos. Estos artesanos se diferencian del resto, ya que han sido designados como portadores de importantes Bienes Culturales Intangibles coreanos, los cuales son considerados como una herencia cultural viviente, porque se han creado y transmitido a lo largo de varias generaciones y han contribuido a conservar la identidad nacional.

De acuerdo con la información presentada en la exposición, los aprendices tienen una formación que a veces requiere hasta cinco años, después de los cuales se convierten en ayudantes o asistentes de sus maestros y que en el futuro podrían ser designados como portadores y capacitar igualmente a otras personas, para evitar que el conocimiento de cierta técnica se pierda en el tiempo. Esta tradición se ha mantenido, desde que se promulgó la Ley de Protección del Patrimonio Cultural en 1962. De acuerdo con la Asociación Nacional del Patrimonio Cultural Inmaterial, esta ley tiene como objetivo preservar y transmitir la cultura tradicional que está desapareciendo por influencia de la modernización. Por eso, para lograr dicho cometido, se estableció el Sistema de Patrimonio Cultural Inmaterial, en el que se designa al portador, que es aquella persona que puede conservar las artes en su forma original, y a una persona para ser capacitada.

Me pareció muy interesante este esfuerzo por conservar tradiciones y conocimientos tan antiguos, así que después de ver algunos de los objetos elaborados con las técnicas artesanales que se consideran como Bienes Culturales Intangibles, decidí investigar más a fondo, para conocer las técnicas de los cuatro objetos que más me gustaron, y de sus portadores, quienes son los responsables de mantenerlas vivas.

Carcaj 

Un carcaj es un cilindro que fue usado para transportar flechas durante la caza, la guerra y, conforme pasó el tiempo, adquirió un uso deportivo. El portador de este bien intangible es Kim Dong-Hak, quien fue designado como tal en 1989. Kim Dong-Hak ha seguido una tradición familiar que se remonta hasta su bisabuelo Kim Jong-Yeon, continuando con la fabricación del carcaj usando métodos tradicionales puros.

Yundo

Se conoce como yundojang a los artesanos que tienen la habilidad para hacer una brújula tradicional llamada yundo, la cual era considerada como una herramienta indispensable para los viajes, la astronomía y para decidir dónde ubicar una casa o tumba de acuerdo al pungsu, o geomancia coreana, el cual se adoptó en el último periodo de Silla. El portador, designado en 2021, es Kim Hee-Soo. Él aprendió la técnica de su padre, Kim Jong-Dae, quien la perfeccionó durante 40 años. Podemos ver a ambos en la imagen superior. Es increíble como, en muchos de los casos, los portadores capacitan a sus hijos y así durante generaciones, convierten estas tradiciones en parte de su historia familiar, e incluso como parte de ellos mismos. 

Tanggeon

El tanggeon es un sombrero tradicional coreano que los hombres usaban debajo del gat, un sombrero formal. Su característica principal es que está hecho de la crin del caballo. Su portadora es Kim Hye-Jeong, quien también ha seguido la tradición familiar, aprendiendo esta técnica desde los 7 años. Como se puede observar en las imágenes y en el vídeo de abajo, es un trabajo que requiere mucha paciencia y atención al detalle. 

Seokjang

Al igual que a la técnica, a los artesanos que fabrican estructuras de piedra, principalmente estatuas budistas, pagodas y puentes, también se les llama seokjang. Este tipo de artesanía viene desde el periodo de los Tres Reinos, y su portador es Lee Jae-Soon, quien a diferencia de los portadores que mencioné anteriormente, no fue nombrado por seguir una tradición familiar, sino que se adentró en ese mundo debido a que su familia hacía trabajos de albañilería. Lee Jae-Soon fue designado como portador en 2007.

Estamos acostumbrados a ver este tipo de esculturas realizadas por personas hace cientos de años, por lo que resulta interesante ver su proceso de creación en la actualidad. En el vídeo de abajo puedes ver como Lee Jae-Soon trabaja para crear cosas impresionantes. 

Estos son solo algunos de los trabajos que más llamaron mi atención, pero hay decenas de técnicas que merecen ser apreciadas, al igual que el esfuerzo de los artesanos coreanos que trabajan a diario para conservar sus tradiciones y su identidad.

shong9412@korea.kr

* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.