Reporteros Honorarios

07.12.2022

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Por la reportera honoraria Kenya Contreras de Venezuela

Fotografías: Kim Shin Hong 


La llegada de culturas tan lejanas y su asentamiento en países diferentes han permitido que la figura del intérprete tome más protagonismo en la creación de puentes para el intercambio cultural, debido a la necesidad de encontrar puntos de convergencia entre los sujetos a través del diálogo.


Kim Shin Hong, conocido con el nombre de Gabriel Kim, por medio de una entrevista realizada el 21 de noviembre en Buenos Aires, Argentina, nos cuenta su experiencia y su perspectiva acerca de la traducción y la interpretación del español al coreano y visceversa.


 Gabriel Kim trabajó como intérprete en los ámbitos gubernamental, cultural y del entretenimiento

Gabriel Kim trabajó como intérprete en los ámbitos gubernamental, cultural y del entretenimiento.


Gabriel Kim ha tenido la oportunidad de trabajar como intérprete en temas gubernamentales como la convención del G20 realizada en 2018 en Buenos Aires, donde colaboró con el equipo de prensa del Gobierno coreano, y ayudó a las delegaciones de Corea en los Juegos Olímpicos de la Juventud que se realizaron en el país el mismo año. Además, ha colaborado con algunas agencias musicales como SM Entertainment, participó en la gira latinoamericana del grupo KARD, y recientemente, fue el encargado de gestionar las comunicaciones de manera directa con Jin, de BTS, quien visitó el país sudamericano para realizar una presentación junto con Coldplay.



¿Qué lo motivó a estudiar la carrera de traductorado?


Creo que lo que me pareció más atractivo a la hora de traducir e interpretar fue el poder de transformar el mensaje para que el receptor lo pueda percibir de una u otra forma, teniendo en cuenta que la interpretación va a depender de cómo se emita esa oración.


En mi caso me gusta más la interpretación que la traducción, porque para interpretar uno tiene que estar en el lugar de los hechos y lidiar con todas las situaciones que se puedan presentar. Es decir, lo que el emisor ha dicho se debe trasmitir de la mejor manera con los conocimientos previos del tema, razón por la cual no se tiene mucho tiempo para pensar.


Para poder llegar a ese nivel se debe tener una base firme, no solamente sobre el área que se esté abordando, sino que también es necesario conocer un poco de todo y eso es lo que más me gusta de la interpretación. De repente el orador puede hablar de deporte o de arte, y se debe tener la capacidad para poder expresarlo en ese mismo instante.


¿Por qué decidió ser intérprete de español-coreano, coreano-español?


Fue un proceso natural. Aunque pertenezco a una familia coreana, nací en Argentina, por lo que fuí criado con ambos idiomas. Siempre que las personas me preguntan qué idioma hablo, respondo que mi lengua materna es la coreana y que mi lengua nativa es el español, materna porque es el idioma que aprendí con mi mamá y el español que lo aprendí siendo argentino.


Cuando era pequeño practiqué mucho la interpretación yendo a la iglesia porque mi tarea era interpretar el sermón del idioma coreano al idioma español y después lo hice con el inglés cuando comencé mis estudios en la universidad.


Mi formación académica formal es español e inglés. No obstante a eso, siempre traté de que mi coreano estuviera al mismo nivel que mis otros dos idiomas, así que estudiaba por mi cuenta. En algún punto surgió la oportunidad de enseñar coreano, y dando clases aprendí mucho más del idioma que en cualquier otro momento.


¿Qué desafíos ha encontrado a la hora de interpretar coreano-español y viceversa?


La falta de conocimiento en algunas áreas. Es cuestión de aprender para poder entender ese tema, y creo que es el desafío que siente cualquier intérprete. 


El segundo es que mi lengua materna es el coreano y la nativa es el español, por eso me siento más cómodo teniendo una conversación del día a día en coreano, pero en lo que es académico o profesional quizá, me resulta más fácil el español, porque es el idioma que usé durante toda mi vida como estudiante, gracias a eso el idioma más natural para mí es el español. 


Mi desafío fue tener que reforzar mi coreano en el aspecto académico y profesional, y para eso me enfoqué en aprenderlo como lengua y no como una forma de hablar. Trataba de leer temas con términos complicados para tener ese elemento profesional en mi cabeza. Con el español me pasó lo contrario, mi punto débil estaba en el diálogo del día a día, de generar ese contacto con las otras personas, las referencias a ciertos aspectos del entretenimiento argentino, esa era la pieza que me faltaba siempre del español.


¿Cuál es el aspecto que hace interesante el idioma coreano?


Creo que el idioma coreano es más sentimental, las formas de expresión son más diversas y específicas. Muchas veces logro traducir una idea del inglés al coreano en una palabra, y lo mismo del español al coreano, pero a veces me cuesta hacer lo mismo del coreano a otro idioma. Es más fácil explicar un término en coreano por su uso en un contexto específico y no a modo general como quizás se hace con la versión en español, en ese sentido el coreano abarca aspectos sociales y culturales mas amplios, lo que lo hace más complejo al mismo tiempo.


Basado en su experiencia, ¿qué rol tiene un intérprete a la hora de conectar dos culturas tan diferentes?


Esos son temas que se debaten mucho entre los profesionales de la interpretación y de la traducción. ¿Cuál es nuestro rol? Si es meramente transmitir un mensaje o si en cierto contexto tenemos la potestad de llegar a ser conciliadores y mediadores de alguna situación.


Soy más de los que creen que el intérprete, puede llegar a ser un mediador. Muchas personas pueden decir “entonces eso no es un intérprete, sino que es un conciliador que sabe hablar ambos idiomas”, que se desvía un poco de su función de servir de comunicador. Pero creo que un intérprete bajo ciertas circunstancias y de buena fe puede cumplir esa función, porque es quien mejor entiende la intención de ambos al hablar los dos idiomas. 


¿Qué opina del interés que hay por aprender coreano en la sociedad argentina?


Es interesante y halagador saber que muchas personas están interesadas en aprender no solamente acerca del idioma, sino también acerca de la cultura coreana en general, ya que por medio del idioma se puede tener una mayor compresión de la cultura. Estoy agradecido con ello y me enorgullece que tengan la intención de aprender más acerca del país de mis padres.


Me gustaría que siga creciendo este interés, porque el conocimiento del idioma abre puertas no solamente en el sentido de oportunidades laborales, sino que permite entender más aspectos de Corea y quizás de culturas vecinas porque se comparten ciertas ideologías y pensamientos.


¿Cuál es el proceso que sigues a la hora de hacer una interpretación?


Trato de conocer en qué contexto se está llevando a cabo la reunión o el evento, el objetivo, los participantes, el rubro y el campo del cual se va a conversar.


¿Cuál ha sido el trabajo más desafiante? 


Una vez tuve que ser intérprete para unos reporteros que venían de Corea a hacer un reportaje sobre el socialismo y el populismo. En la agenda teníamos una entrevista con el viceministro de Economía de Argentina, quien comenzó a hablar de un montón de índices económicos con términos muy específicos, que eran complicados de entender porque era necesario saber los conceptos de la economía, y por eso era difícil transmitirlo en otro idioma.


Después de eso, comencé a leer muchas notas periodísticas que tenían que ver con economía y me suscribí a ciertos periódicos para poder adentrarme más en ese tópico. Esa fue la experiencia más desafiante.


¿Cuál ha sido el trabajo que más ha disfrutado?


El trabajo que más disfruté fue una auditoría para una fábrica de marcapasos que quería hacer importaciones en Corea, en esta actividad participó el Ministerio de Higiene y Salud y otros institutos más del país. Esa vez visitamos la planta de producción y nos reunimos para tratar algunos detalles del proceso y solicitar información. Fue una experiencia divertida y agradable a la vez, porque no se trató solamente de traducir del español al coreano, sino que también tuve que hacerlo incluso en inglés.


¿Qué consejo le daría a las personas que quieren dedicarse a la interpretación de coreano-español y viceversa? 


Tiene que tener pasión, tiene que sentir esa chispa de fuego para que se divierta al hacerlo. En lo personal, yo no siento esa pasión en la traducción, pero sí en la interpretación.


Para poder cumplir bien la función de ser un buen intérprete lo esencial es el conocimiento del idioma, pero no solamente conocer su teoría, sino también poder hablarlo. Muchas personas creen que no es necesario saber acerca del tema y que con hablarlo es suficiente, pero no es así, se requiere tener una formación académica para poder interpretar bien lo que la otra parte está diciendo.



Gabriel Kim, intérprete del idioma español y coreano

Gabriel Kim, intérprete del idioma español y coreano




shong9412@korea.kr

* Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo hacia Corea.