Varias mujeres se unen para protestar y reivindicar el derecho que tienen sobre sus cuerpos. | Yonhap News
Por la reportera honoraria de Korea.net,
Adriana Castilblanco de
México
20 de abril de 2020
Durante la última década, los movimientos en pro de los derechos de las mujeres han tenido auge alrededor del mundo: desde las Américas hasta Asia, de norte a sur del orbe, miles de mujeres se han unido para protestar y hacer un cambio de acuerdo a los problemas con los que se enfrentan cada una en su contexto.
Corea del Sur no es una excepción, ya que aparte de estar rompiendo con los estándares de belleza que la sociedad les ha impuesto durante años, el siguiente paso que definitivamente pasará a la historia es el de la legalización del aborto en este país.
Para comprender la situación es importante explicar un poco el trasfondo: al terminar la Guerra de Corea (1950-1953), el documento que pasó a dictar las normas bajo las que se rige la sociedad coreana fue el Código Penal de 1953. En él, uno de las leyes estipula la estricta prohibición de abortos a las mujeres que lo deseasen hacer, con una sentencia de hasta un año de prisión y una multa de hasta dos millones de wones para la mujer que aborta, y una sentencia de hasta dos años de prisión y una suspensión de su licencia médica por siete años al doctor o profesional de la salud que ayude en este acto. No fue hasta la enmienda a la Ley de Salud Maternal e Infantil de 1973 cuando se estipula que un aborto solamente es exento de penalización si se trata de un caso de violación, si existe alguna enfermedad congénita, fue producto de incesto, o si la vida de la madre está en riesgo, aunado a que este aborto debe de ser hecho dentro de las primeras 24 semanas de gestación.
Es importante destacar que, a pesar de la mano dura con la que se intentó hacer cumplir esta ley en específico, existieron casos en los que no se cumplió al 100%. Durante las décadas de los 70 y 80, la necesidad de reducir las altas tasas de fertilidad hizo posible que muchos abortos clandestinos fueran efectuados sin recibir represalias, aún a sabiendas de quiénes y con la ayuda de qué otras personas lo habían hecho. Sin embargo, una vez entrado el nuevo milenio, la suma de grupos pro-vida, religiosos, y el mismo gobierno fueron los que buscaron aumentar de nuevo la tasa de fertilidad.
Conforme fue avanzando el tiempo, un debate entre efectuar acciones para frenar los abortos ilegales versus modificar la ley para que estos abortos fueran lícitos fue ganando terreno. Los sucesos que se destacan tras esta visibilización del problema son: en el 2017, una petición para legalizar la venta de mifepristona fue hecha, concluyendo en que en noviembre de ese mismo año se modificó la ley para responder a esta petición; en 2018 se llevó el caso de la legalización del aborto a la Corte Constitucional, la cual fue la encargada de escuchar los cuestionamientos sobre la constitucionalidad de la ley del aborto. Se concluyó que la misma ley, así como la penalización a las mujeres y profesionales médicos que conscientemente efectúen un aborto, eran inconstitucionales y van en contra de los derechos humanos de estas al limitar el derecho a la autodeterminación de la mujer que ha sido embarazada; durante la década de los 2010 hubo una disminución de las cifras del aborto gracias al aumento en la concientización del uso de anticonceptivos y control de natalidad.
Es también necesario hablar sobre que, ya que hasta el momento el aborto sigue siendo ilícito, muchas mujeres son obligadas a dar a luz en contra de su voluntad; y muchas de ellas, aún siendo jóvenes, son obligadas a dejar sus estudios o a transferir escuelas hacia instituciones remotas. Debido a esta situación, muchas mujeres han optado por dar a sus hijos en adopción (una alternativa que utilizan, llamada Babybox, fue creada para darles a esos bebés una segunda oportunidad)
Sin embargo, hace unos días la ley de prohibición de los abortos fue puesta en revisión gracias a que una doctora la retara. El resultado de este juicio es que, el 11 de abril del 2020, se declarara que para diciembre del año en curso se hiciera una revisión minuciosa a dicha ley, se reformara, y para efectos del 1 de enero del 2021 el aborto sea legal en todo el país.
Este hecho sin duda marca un parteaguas en la historia de Corea quien, a pesar de ser un país apegado a sus tradiciones y costumbres, va evolucionando día con día y nos va dejando ver al resto del mundo cómo un país puede romper su molde y reformarse en pro del bienestar de su población.
brightsong@korea.kr
Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afección y entusiasmo.