Por la reportera honoraria Ianina Elizabeth Osgueritchian de Argentina
En un mundo del arte global en constante cambio, el profesor Iain Robertson ha desempeñado un papel clave en el acercamiento entre el arte coreano y occidental. Actualmente es profesor en el Departamento de Gestión de Artes y Cultura de la Universidad de Hongik en Seúl, y anteriormente fue jefe de Estudios de Negocios de Arte en el Instituto de Arte de Sotheby’s en Londres. Su trayectoria profesional refleja un enfoque global y multidisciplinar.
Robertson ha vivido en Corea durante los últimos tres años, pero su afinidad por la cultura asiática comenzó mucho antes, durante su trabajo en asuntos exteriores en China y Taiwán. Esta primera exposición al arte y la cultura de Asia lo llevó de regreso a Londres, donde su paso por Sotheby’s profundizó su comprensión del mercado de arte global. Tras 17 años, decidió volver a Asia, esta vez a Corea, donde continúa realizando aportes significativos al mundo del arte.
Tuve el placer de conocer al profesor Robertson durante el conversatorio "Le salon de Feliz", celebrado en el marco de la exposición realizada del 1 de mayo al 12 de junio en la galería K-Liz, en Seúl.
El evento, centrado en la primera muestra individual del joven artista Feliz Park, sirvió como punto de encuentro entre generaciones y culturas, y fue una oportunidad para reflexionar sobre el cruce entre el arte coreano y occidental, un tema en el que el profesor Robertson ha trabajado activamente.
En esta entrevista, exploramos su recorrido, sus ideas sobre el arte coreano y su visión sobre el intercambio artístico entre Oriente y Occidente.
El profesor Iain Robertson posa frente a una obra del artista Feliz Park durante el evento 'Le Salon de Feliz' en la galería K-Liz, Seúl. | Galería K-Liz
¿Cómo comenzó su trayectoria en el arte?
Mi viaje comenzó en Londres, en el Instituto de Arte de Sotheby’s, donde tuve el privilegio de dirigir los estudios de negocios de arte. Este rol me abrió los ojos a la vastedad de las culturas artísticas globales. Mi interés por el arte coreano surgió durante una consultoría con la Feria Internacional de Arte de Corea. La profundidad y singularidad de sus expresiones artísticas me fascinó, lo que me llevó a la Universidad de Hongik, donde he podido sumergirme tanto en el arte coreano tradicional como contemporáneo. Me llama la atención especialmente cómo las escuelas de arte en Corea se enfocan en habilidades prácticas como el dibujo y la pintura, en contraste con el enfoque más teórico que predomina en muchas instituciones occidentales.
Además, he escrito dos libros, Nuevas artes, nuevos mercados y Comprendiendo los mercados de arte (Dentro del mundo del negocio del arte), así como coautor de Mercado de arte global: historia y tendencias actuales con Derrick Chong y Luis U. Alfonso, donde exploramos estas dinámicas en profundidad.
¿Por qué decidió involucrarse con el artista Feliz Park?
Mi participación con Feliz Park comenzó gracias a mi conexión con Liz, directora de la galería K-Liz. Nos conocimos en una exposición sobre arte e inteligencia artificial organizada por un grupo francés, y me atrajo de inmediato el enfoque único de la galería. El compromiso de Liz de ofrecer un espacio a artistas jóvenes y emergentes resonó conmigo. La obra de Feliz Park me llamó la atención por su mezcla innovadora de elementos coreanos y occidentales, convirtiéndolo en un ejemplo perfecto del puente cultural que busco fomentar.
¿Cuándo se dio cuenta de la importancia de conectar el arte coreano y occidental?
Esta conciencia se afianzó durante mis primeros años en Sotheby’s, donde observé el enorme potencial de los intercambios culturales en el mundo del arte. Más tarde, en mis consultorías en Corea, confirmé la importancia de visibilizar las cualidades únicas del arte coreano para una audiencia internacional. Esto permite un diálogo más rico entre culturas y una apreciación mutua más profunda.
¿Dónde ve el papel de los jóvenes artistas coreanos en este intercambio cultural?
Los jóvenes artistas coreanos están a la vanguardia de este intercambio. Aportan nuevas perspectivas y reinterpretan las formas tradicionales de manera innovadora. Al mismo tiempo, se mantienen conectados con sus raíces culturales y abren el arte coreano a una audiencia global. Su trabajo es clave para asegurar la relevancia del arte coreano en el mercado global.
Literatura escrita por el Iain Robertson | Iain Robertson
¿Quién ha influido en su visión del mercado de arte global?
Sin duda, mis años en Sotheby’s fueron formativos. Allí, y en mis colaboraciones con artistas y curadores de todo el mundo, desarrollé una red y un conocimiento que me permiten tender puentes entre el arte coreano y occidental.
¿Cómo cree que este intercambio impacta en el mundo del arte?
El impacto es profundo: al fomentar un diálogo intercultural, se enriquece la práctica artística, se promueve una escena más inclusiva y se amplía la visión de coleccionistas, curadores y espectadores. Este tipo de interacción permite nuevas formas de colaboración entre comunidades artísticas, fortaleciendo así el tejido cultural compartido.
Es un momento apasionante para el arte, y me honra ser parte de este viaje de unión cultural a través de la creatividad.
En un mundo donde el arte funciona como un lenguaje universal, el recorrido del profesor Iain Robertson se convierte en un testimonio del poder del intercambio cultural. Su trayectoria, sus publicaciones, su labor docente y su apoyo a jóvenes artistas como Feliz Park han enriquecido tanto a la comunidad artística coreana como a la internacional, recordándonos el valor de la colaboración entre culturas para tejer un panorama artístico más vibrante y diverso. se convierte en un testimonio del poder del intercambio cultural. Su trayectoria, sus publicaciones, su labor docente y su apoyo a jóvenes artistas como Feliz Park han enriquecido tanto a la comunidad artística coreana como a la internacional, recordándonos el valor de la colaboración entre culturas para tejer un panorama artístico más vibrante y diverso.
kimhyelin211@korea.kr
Este artículo fue escrito por una reportera honoraria de Korea.net. Nuestro grupo de reporteros honorarios es de todo el mundo y trabaja para compartir su afecto y entusiasmo hacia Corea.