Por Park Byung-gyu y Elías Molina

Videos: Lee Jun Young, canal de Korea.net en YouTube y monje Jibong

Condado de Namhae-gun, provincia Gyeongsangnam-do

Un elemento crucial a tomar en cuenta antes de viajar es el clima. Aunque sirve como elemento crucial de un viaje, el clima es una variable más allá del poder humano. Una vez que se completan las tareas básicas, como gestionar el itinerario, el transporte y el alojamiento, sólo se puede orar para que haga un buen clima.

Todo el mundo anhela un cielo azul, un océano cristalino, verde vegetación, flores de colores o campos nevados de un blanco prístino, aunque un viaje perfecto que cumpla con todas las condiciones deseadas es imposible. Por lo tanto, un viajero simplemente debe hacer todo lo posible para hacer frente a las condiciones dadas.

El 13 de abril, un equipo de Korea.net visitó el condado de Namhae-gun, provincia de Gyeongsangnam-do. El cielo estaba nublado, el viento soplaba fuerte y llovía intermitentemente. El mar, a menudo llamado "el Mediterráneo de Corea", estaba turbio, con olas ondulantes y el viento estaba bastante sombrío para una ciudad cálida del sur en abril.

Si bien es fácil encontrar el paisaje del condado en medio de un clima claro y sereno fácilmente en internet, por el contrario no es fácil encontrar escenas de la isla bajo un clima turbulento. Paradójicamente, esto ofrece una condición óptima para apreciar la isla de Namhae desde otra perspectiva. El sonido de las olas creado por los fuertes vientos es distinto al que se escucha en los días soleados.

La isla de Namhae es la quinta más grande entre las 3.300 islas de Corea. Situada en la parte más meridional de la península de Corea, está bastante lejos de Seúl. Debido a las dificultades de transporte, la isla no es un lugar sistemático para el turismo, pero ofrece el lugar perfecto para pasear en medio de una vista autóctona de las aldea pesqueras de Corea, así como para descubrir viejas historias.

El mar entre los islotes en el estrecho de Jijok, en el municipio de Samdong-myeon es cautivador con sus jukbangnyeom (presas de pesca de bambú) y sukbangnyeom (presas de pesca de piedra), dos métodos de pesca tradicionales de Corea.

Un antiguo almacén de refrigeración que alguna vez estuvo en mal estado en el pueblo de pescadores fue reconvertido en un complejo cultural que armoniza con la naturaleza. Space Mijo, en el municipio de Mijo-myeon, ha transformado un intercambiador de calor en una instalación de arte y un tanque de hielo en una sala de espectáculos, forjando las bases para que la cultura y el arte se fundan con los residentes. El interior se irá llenando gradualmente de espacios como salas de exhibición y espectáculos, cafeterías, restaurantes, boutiques y residencias para artistas.

El condado también cuenta con sitios interesantes, como la 'aldea alemana', que fue construida por mineros y enfermeras coreanos que regresaron al país luego de trabajar en Alemania durante la década de 1960, la 'aldea estadounidense' que alberga una réplica de la Estatua de la Libertad y el camino de árboles de metasecuoya.

Los encantos ocultos de la isla en un clima nublado también se pueden encontrar en las montañas. El templo Geumwangsa, en el municipio de Idong-myeon presenta una vista pintoresca con las nubes a sus pies.

Geumwangsa también cuenta con rocas cuya apariencia es particular desde la primera mirada. La sobrecogedora escultura natural aparenta ser semejante a una estatua de Buda, un falo o la máscara de Iron Man, según desde donde se la mire.

A diferencia de los turistas coreanos que abandonan rápidamente un lugar una vez que terminan de tomar fotografías, sus contrapartes extranjeras tienden a pasar horas observando las rocas. Durante una conversación con un monje budista en un acogedor ático en medio de la montaña, nos ofreció una sabia respuesta a la tonta pregunta sobre en qué pensaba mientras miraba las rocas: "¿Que qué pienso? No pienso en nada".

¿No es acaso esa la mentalidad que uno debería tener mientras se visita la isla de Namhae?

bgpark71@korea.kr